¿Qué debo considerar antes de una cirugía de rodilla?

Tener una lesión en la rodilla puede resultar muy doloroso, pues afecta a una de las articulaciones con mayor relevancia en nuestro cuerpo al momento de movilizarnos y apoyar nuestro peso.

Sabemos que, si tienes una lesión de este tipo, puedes sentirte alarmado. Sin embargo, la frecuencia de operaciones en esta zona del cuerpo es tan alta, que la mayoría de médicos especializados en traumatología y cirugía ortopédica, tiene amplia experiencia en estos casos.

¿Sabes qué hacer en una situación así? Tranquilo(a), aquí te contamos paso a paso lo que debes hacer para llevar una cirugía de rodilla sin complicaciones.

En la Clínica

Asiste a tu centro médico de confianza y separa una cita para reunirte con un médico especialista en traumatología o un cirujano ortopédico. De acuerdo a la gravedad de la contusión, este te indicará una serie de evaluaciones y exploraciones de la zona a tratar.

1. Informa a tu médico acerca de todo tipo de problema o información que sea necesaria saber: ¿Eres alérgico? ¿Estás tomando un medicamento? ¿ingieres anticoagulantes? ¿estás embarazada? ¿sufres una enfermedad crónica? Todas estas preguntas deberán ser correctamente respondidas para que el equipo de la intervención y tú, tomen las precauciones necesarias.

2. Realiza exámenes pre-operatorios. De este modo, el equipo de cirugía y anestesia sabrá si eres apto para la intervención. Aquí, se te realizarán exámenes de sangre y solicitará una placa de tórax.

3. Deberás realizar la firma del consentimiento informado, habitual en todo tipo de cirugía clínica. Aquí debes certificar las complicaciones y autorizar al médico que realizará la cirugía.

¿Cómo preparar tu hogar?

Una vez que tu operación haya sido programada en la clínica y, tu médico de confianza conozca a la perfección cómo lidiar con ciertas complicaciones que puedan presentarse; es hora de preparar tu casa y los ambientes que más utilizas, para recibirte tras la operación.

1. Asegúrate de separar prendas cómodas para tus días de reposo; de ese modo, no deberás realizar demasiado esfuerzo en la rodilla operada para colocártela.

2. Consigue un par de muletas, para poder movilizarte durante las primeras semanas post operación.

3. Modifica las áreas que frecuentes como, el baño o la sala de estar, para no realizar demasiado esfuerzo al sentarte.

4. ¿Tu departamento está ubicado en una planta elevada de un edificio sin ascensor? ¿en el segundo piso de tu casa? Evita realizar mucho esfuerzo con tu rodilla intervenida y, durante el tiempo de reposo, descansa de preferencia en una habitación en el primer piso de tu hogar.

5. Elimina los riesgos. Con esto, nos referimos a que quites los cables, alfombras, coloques un antideslizante en la bañera y crees espacios amplios para poder movilizarte y evitar accidentes.

Hábitos a evitar

Para que tu etapa de recuperación sea realmente exitosa, también es necesario que cambies tus hábitos.

1. Elimina el hábito del tabaquismo. Fumar cigarrillos ocasiona que tengamos problemas de circulación, lo que hará que la operación tarde tiempo en sanar y cicatrizar.

2. Antes de la operación, debes evitar por lo menos con 48 horas de anticipación, ingerir bebidas alcohólicas.

Otras recomendaciones

Por último, no olvides que, aunque esta operación sea muy habitual, debes tomar en cuenta ciertas medidas que te faciliten una movilización sin mucho esfuerzo en el instante que te den de alta en la clínica, como:

2. Contacta a un físico-terapeuta de rehabilitación recomendado por tu médico traumatólogo, para que te acompañe durante los primeros meses de recuperación post-operación.
3. Días antes de la operación, separa un servicio de taxi que te pueda llevar cómodamente a casa.